¿Por qué ir de camping rural?
Existe multitud de formas de turismo en la actualidad, tantas casi como destinos. Hoteles, alojamientos y formatos de pernocta con infinidad de variedades, llegando casi al límite de ser configurables al 100% por el cliente. Entonces por qué ir de camping en Granada. Muy fácil, porque es una forma de estar en contacto con la naturaleza. Y también podrás configurar tu alojamiento. Ya que tienes la opción de acampar con tu tienda de campaña o autocaravana, alojarte en un bungalow rural o disfrutar de una parcela con tu camper.
Razones para ir de camping
¿Qué ofrece en la actualidad una estancia en un camping Granada? ¿ Por qué se está convirtiendo en una alternativa al alza para pasar las vacaciones y creando tendencia consolidándose como sector pujante? Es decir, por qué ir de camping.
De los diversos aspectos que pueden fundamentar esta tendencia, existen varios de ellos que son significativos y evidentes. En el imaginario social existe una imagen mental del campista tipo, alguien con su equipo completo de tienda de campaña, mosquitera, hornillo de gas y botas de montaña; que disfruta de la experiencia de la naturaleza más pura. Un perfil que busca la tranquilidad, el contacto con el medio, que en ningún caso busca una cama y/o decoración de una habitación y cuyo fin al acampar es disfrutar de los elementos básicos de la estancia que a la postre son los más celebrados cuando se hace resumen final del viaje.
Hoy en día este concepto es más amplio, se abre a almas nómadas que compran su caravana, autocaravana o camperizan una furgoneta y recorren rutas disfrutando de esa sensación de viajar sin ataduras a una ciudad o un alojamiento concreto.
Sobran los motivos
Cada vez es más difícil ver niños jugar con total libertad y un camping como el nuestro, con un marcado carácter familiar, ofrece a las familias un modo vacacional que supone aire fresco en el desarrollo social y natural de sus hijos. Un recinto cerrado, carente de riesgos externos, que proporciona facilidades para el juego, las relaciones personales y el disfrute del día completo. Cada vez más familias optan por este tipo de alojamientos vacaciones porque, a diferencia de hoteles, apartamentos o resort, no existe corsé o limitación para el juego.
De igual modo que los más pequeños, los mayores crean vínculos en cuestión de horas con los vecinos de parcela, bungalow o zona de acampada. Encender la barbacoa, ofrecerse una cerveza fresca, participar en juegos o actividades con los pequeños, etc. Momentos que nos reconectan con los demás, que hacen que nos evadamos plenamente del estrés semanal, del bullicio de la ciudad, de los horarios de los buffet de hotel.
Súmale el contacto con la naturaleza más pura, oír el canto de las aves, ver ardillas subiendo por los pinos, zambullirte en una playa de aguas cristalinas, puras y dulces, hacer deportes acuáticos, senderismo o ciclismo, el turismo de aventura, salir a recoger setas o hacer una ruta gastronómica. Disfrutar nuestros bungalow con chimenea en otoño o invierno, bailar en fiestas temáticas, practicar tiro con arco o paintball, o simplemente acercarte a cantar el karaoke.